AirSeal® iFS, socio perfecto en la formación en cirugía robótica
No todos los días es posible conversar con un profesional con tanta experiencia en cirugía robótica como el Dr. Alexandre Mottrie, que comenzó a usar esta técnica en 2004. Además de su faceta clínica, el Dr. Mottrie es fundador y CEO de la mundialmente conocida Academia ORSI (Bélgica), un centro puntero de formación en cirugía robótica. También es presidente de la Sociedad de Cirugía Robótica y de la Sección de Urología Robótica de la Sociedad Europea de Urología (EAU, por sus siglas en inglés).
En esta entrevista, ConMed ha abordado con él su experiencia con AirSeal® iFS en la práctica quirúrgica diaria, pero también en las instalaciones formativas de la Academia ORSI, donde usan este sistema de insuflación inteligente casi desde los inicios de su comercialización.
Antes de empezar a utilizar AirSeal® iFS, cuéntenos algunos de los retos que usted y algunos de sus colegas enfrentaron en la cirugía laparoscópica y robótica.
Tengo la maravillosa oportunidad de observar y trabajar con excelentes cirujanos de todo el mundo. Muchos de ellos son profesores invitados o estudiantes que vienen a perfeccionar sus habilidades a la Academia ORSI.
Independientemente de las aptitudes, la pérdida intraoperatoria de neumoperitoneo, ya sea causada por fugas del trocar o por el uso de succión, es una fuente de frustración para los cirujanos y puede ser un desafío para el paciente, particularmente en procedimientos más avanzados como las nefrectomías parciales. Tanto, que yo mismo he declarado públicamente en varias ocasiones que no usar AirSeal® iFS durante estos procedimientos puede poner al paciente en peligro.
Y es que para compensar la pérdida de espacio de trabajo intraabdominal, los cirujanos a menudo operan a presiones intraabdominales más altas de lo necesario. Los dispositivos más nuevos basados en energía (radiofrecuencia/ultrasonidos) mejoran la eficiencia operativa pero crean humo quirúrgico, lo que limita la capacidad de ver el campo operatorio y alarga el tiempo de intervención. Al aspirar humo, enseñamos a nuestros equipos a que usen la succión con moderación, aunque esto no siempre es práctico en situaciones en las que se requiere una succión agresiva. Juntos, estos dos problemas comprometen la exposición y la visibilidad quirúrgicas, agregando riesgo a los procedimientos robóticos y laparoscópicos.
En su opinión, ¿cómo ha cambiado esta situación el uso de AirSeal® iFS?
Yo uso AirSeal® iFS en cada procedimiento. Ha eliminado el problema de la pérdida de neumoperitoneo, incluso con el uso de una succión agresiva. Además, AirSeal® iFS es un excelente evacuador de humo. Debido a que recircula y filtra el gas insuflado, protege tanto al paciente como al personal del quirófano de los agentes patógenos del humo al tiempo que mantiene el campo quirúrgico perfectamente visible. Combinadas, estas dos características de AirSeal® iFS logran menos retrasos en los procedimientos, lo que, a su vez, mejora la eficiencia general.
¿Qué más cambios ha notado en las cirugías que realiza desde que usa AirSeal® iFS?
Gracias a la estabilidad del neumoperitoneo que proporciona AirSeal® iFS hemos podido reducir significativamente la presión intraabdominal que usábamos, que ahora suele ser de habitualmente de unos 8 mmHg. Esto es importante por varias razones.
En primer lugar, nuestros anestesistas pueden manejar más fácilmente la ventilación del paciente a presiones más bajas, ya que la presión máxima en las vías respiratorias y los niveles de dióxido de carbono exhalados son sustancialmente más bajos.
En segundo lugar, varios estudios han demostrado que reducir la presión intraabdominal reduce el dolor postoperatorio del hombro y el uso de opioides, lo cual es bueno para los pacientes. Algo que estamos planeando validar con un estudio clínico en los próximos meses.